En mi vida me han abordado todo tipo de pedigüeños. El que quiere que le completen un pasaje para Los Minas, el de la pala y el pico enlodados que se desmaya por hambre, el sordomudo de la guagua, el que le da epilepsia siempre frente a donde hay turistas o gente de dinero reunida y cae en medio de una avenida peligrosa, la derretida que le operaron un lado de cara y no quiso operarse el otro porque vivía de eso, la que tiene una hija con sida y le ha dejado sus dos hijos pequeños, el que le falta una pierna porque se le perdió dentro del pantalón.
Pero el caso que quiero tratar es muy original. Hace unos días me abordó un haitiano y de forma muy cortés me preguntó si hablaba francés o inglés, le dije que algo de inglés pero aun así me habló en un español no muy fluido. Me explicó que trabajaba en una construcción y que el ingeniero lo despidió sin dinero y que iba para Boca Chica. El joven, de alrededor de 28 a 32 años me pareció muy convincente, una historia nueva, le aflojé RD$35.00.
Hoy escucho a un compañero de trabajo hablando del carajo de la Lincoln que pide ocultando una pierna en el pantalón y dice que por gente así pagan los que en verdad lo necesitan. Que por ejemplo la semana pasada se encontró con un joven haitiano... No lo dejé terminar, le completé la historia incluyendo el lugar hacia donde se dirigía el "infeliz". Mi amigo, echó la cabeza hacia atrás y explotó en una carcajada. Me dijo cuando el haitiano le pidió no tenía dinero y le había dicho a quien le acompañaba que le diera RD$50.00, que él se lo pagaba después.
Reí también de buena gana mientras por dentro me consolaba pensando que por suerte yo le había dado menos por lo tanto había sido menos tonto. Ah idiota que se consuela con el mal de muchos, de igual forma igual me habían visto la cara de p...
Habían matado a un general...
lunes, 27 de octubre de 2008
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1 comentario:
Aja, te faltaron los que píden en el Aila, desde los oficiales de Inmigración que trabajan allí, hasta los maleteros.
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